sábado, 15 de junio de 2013

Club Atlético Independiente, Rey de Copas

¿Qué decir hoy de vos, Independiente de mi alma? No se puede decir nada. Hoy es y va a ser siempre, un día de mierda, un día horrible para nuestra historia. Pero como cualquiera, los grandes también podemos tener caídas. Igualmente, ya sabemos que la B nos queda sumamente chica, porque somos demasiado grandes… Decir que bajamos por la cantidad de lacras que hay ahora en el fútbol, de políticos que sólo les interesa su bolsillo, está de más, eso está completamente dicho, es así… Por desgracia, ESO es el fútbol argentino ahora, una completa vergüenza, pero ya está, le pasó a todos los equipos, y ahora nos tocó a nosotros. Así que tenemos un añito para pasear en la B, y volver al lugar de donde nunca deberíamos habernos ido, a la A, como se debe. Vamos a volver a ser el Independiente de antes, y van a pagar como deben los traidores que así de mal le hicieron y hacen a nuestro club. "Volverá el rojo de sus ruinas y pagarán su culpa los traidores".
No, no fui toda la vida de Independiente, nací de Boca, ¿Y? Por algo me habré hecho de Independiente no? Sin entender mucho, ni tener una influencia del rojo, me hice de Independiente, y ahora lo quiero y verlo de esta  manera me hace mierda. Sí, obvio, hoy lloré, me sorprende vernos donde estamos, y hasta el día de hoy, también diría que si se va Boca un poquito me dolería, más allá de ver el dolor de mi mamá, me dolería ver al equipo del que nací y tan fanática era, yéndose a la B, pero por ahora no pasó. Ahora lo que pasa es que se fue mi club, el club del que AHORA soy fan, triste es POCO.
Que hoy nos hayamos ido, no nos quita la historia que tenemos, los títulos que tenemos y las copas que ganamos. Seguimos y seguiremos siendo, SIEMPRE, el rey de copas y el Gran Independiente! “La historia te dice quién sos”.
A los grandes, no los quiere nadie, y todos viven de sus derrotas, por eso ahora, todos hablan de nosotros. Pero como somos tan grandes, nos fijamos en nosotros y nada más, lo que hablen los demás no importa.
“Ahora que estamos en las malas, nunca te voy a abandonar…” Y así es rojito! Las buenas ya van a venir!

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